Camino Francés: Etapa 21

Abandonamos León por el Parador de San Marcos, en cuyas inmediaciones se encuentra el río Bernesga. Si salimos desde el albergue de las Benedictinas, deberemos tomar las calles de la Rúa y Ruiz Salazar para poner rumbo a la Real Colegiata de San Isidoro. En la calle Ramón y Cajal giramos a la izquierda por la calle Renueva y la avenida Suero de Quiñones nos llevará directos al Parador.

Tras cruzar el río, seguimos por el margen izquierdo de la avenida de Quevedo y posteriormente por otra avenida, en este caso la que hace honor al párroco Pablo Díez. Más adelante nos encontraremos con el escollo de las vías del tren, las cuales cruzaremos por una pasarela habilitada para ello hasta Trobajo del Camino. A la altura de una floristería deberemos girar a la izquierda hacia la plaza de San Pedro, desviándonos a la derecha por una calle con el mismo nombre. Vamos en busca de la N-120, a la cual accederemos tras cruzar por un paso de peatones y adentrarnos en una zona repleta de naves industriales. Tomamos una senda paralela a la carretera y tras pasar una estación de servicio llegaremos a Virgen del Camino, la que bien podría ser nuestro primer alto en el Camino ya que aquí podremos encontrar una amplia oferta de panaderías y bares.

Es en este punto donde tendremos que tomar una de dos variantes que se presentan ante nosotros. El trazado original de San Martín o tomar la senda a Villar de Mazarife. La primera discurre en su mayor parte por una vía paralela a la N-120, repleta de servicios, y la otra en cambio se adentra en el páramo, sobre sendas de tierra, para conducirnos hacia Villar de Mazarife, localidad que reclama desde hace años su condición de villa jacobea.

Si nos decantamos por esta última opción, deberemos tomar un desvío hacia la izquierda, tras bajar por la calle de la Paz. En esta variante dejaremos de lado el asfalto para discurrir por caminos de tierra y gravilla los veintidós kilómetros que separan León de Villar de Mazarife, pasando por las localidades de Fresno del Camino, Oncina de la Valdoncina, Chozas de Abajo y finalmente Villar de Mazarife, donde podremos encontrar varios alojamientos donde pernoctar. Si durante el trayecto decidimos modificar la ruta, podremos retomar la vía original que transcurre por la N-120 en cualquier momento, estando muy bien señalizada mediante las típicas flechas amarillas.

Siguiendo el trazado original, tendremos que seguir de frente tras descender por la calle de la Paz, dejando a un lado la fuente del Cañín y un cementerio más adelante. Ya notamos la presencia de la N-120, cruzando previamente por un túnel bajo la autovía y nada más salir giramos a la derecha. Seguimos esta senda descendiendo de nuevo hasta una zona con algunas naves industriales y cogemos ahora sí el camino que transcurre paralelo a la carretera nacional, el cual no abandonaremos hasta el final de esta etapa. Tan sólo unos metros más adelante la localidad de Valverde de la Virgen aparece ante nosotros, situada en el solitario páramo. El trazado no abandona la senda de tierra en ningún momento, pero si deseamos hacer un alto en Valverde deberemos de desviarnos ligeramente hasta alguno de sus bares.

El siguiente pueblo que pisaremos será el de San Miguel del Camino, donde también hay algunos establecimientos donde descansar, una fuente y un entrañable vecino que ofrece algo para picar desde su ventana. De nuevo, lo atravesamos por el andadero de tierra y unos seis kilómetros más adelante nos encontraremos en Villadangos del Páramo. A la salida del pueblo tomamos un desvío a mano derecha y unos metros más adelante una fuente nos invita a hacer un alto para recorrer tranquilamente los últimos dos kilómetros que restan para llegar a San Martín del Camino, nuestro punto de destino en la etapa de hoy.

No olvides tener en cuenta:

Al comenzar nuestra etapa saliendo de una gran ciudad, su periferia puede resultar algo incómoda de recorrer dada la alta concentración de polígonos industriales. Al igual que en etapas anteriores, en los tramos que discurren cerca de la N-120 conviene prestar mucha atención a la hora de cruzar, sobre todo en algunos puntos que carecen de pasos de peatones.

Para las personas con discapacidad se recomienda continuar por la N-120 en el tramo que une León y la Virgen del Camino. Por la parte que concierne a los ciclistas, pedalear por una gran ciudad siempre implica ciertas dificultades. En este caso, la mayoría de los indicadores se encuentran en el margen izquierdo de la calzada, por lo que es necesario ir prestando mucha atención, sobre todo hasta llegar a la altura del desvío en la floristería mencionada anteriormente.