También conocido como Año Santo o Año Xacobeo, el Año Jubilar enraíza sus orígenes en las leyes de Moisés. Concretamente, la palabra jubileo proviene del hebreo “yobel”, instrumento musical con forma de cuerno que servía para anunciar las buenas nuevas.
Así es como narra el Antiguo Testamento que cada cincuenta años se proclamaba el denominado año Jubileo, en el cual según la tradición judía se debían de perdonar todos los pecados, devolver las tierras a sus dueños y liberar a los esclavos.
Esta tradición proviene de la propia ley de Moisés, donde se establece que las tierras se cultivarían durante seis años, descansando así el séptimo y siendo, por lo tanto, este un año sabático. Además, tras haber transcurrido siete ciclos y por lo tanto cuarenta y ocho años, el año cuarenta y nueve sería sabático y el cincuenta Santo.
En este año especial, los pertenecientes a los estamentos privilegiados debían perdonar las deudas a sus siervos y liberar a sus esclavos, buscando así la igualdad de todos los judíos.
Tal y como relata el Levítico 26: 1-17, se trata de un año de reposo, donde se le devolverán las posesiones a aquellos que las hubieran perdido y en el que “no sembraréis, ni segaréis lo que naciere del suyo en la tierra, ni vendimiaréis sus viñedos”.
Posteriormente, la iglesia católica modificó ligeramente esta tradición, confiriéndole un significado mucho más espiritual. En vez de devolver sus tierras y posesiones a aquellos que las habían perdido, en este año todos los católicos podrían pedir el perdón por todos sus pecados, reencontrándose así con Dios y renovando sus votos.
Fue en 1300 y el papa Bonifacio VIII estableció que a partir de ese momento sería año Jubilar Ordinario una vez cada centuria. Pero tras haber transcurrido tan sólo cincuenta años, el papa Clemente VI solicita convocar anticipadamente el año Santo, tras los sucesos trágicos que estaban asediando Roma: epidemias de peste, terremotos y varias confrontaciones militares.
No sería esta la definitiva ya que en años posteriores se modificó primero a los treinta y tres años, en honor a la edad de Cristo al morir y de nuevo a los cincuenta.
Finalmente, se estableció el período en veinticinco años, con la intención de que todas las generaciones de fieles pudiesen disfrutar al menos una vez de este perdón.
A pesar de ello, gracias a un privilegio otorgado por el Papa Calixto II a la ciudad compostelana, se celebran los años Santos cada vez que coincida en domingo el 25 de Julio, festividad de Santiago.
Cada año Santo se inicia la ceremonia inaugural con la apertura de la Puerta Santa de la Catedral de Santiago el 31 de Diciembre, proceso en el que el arzobispo golpea tres veces esta puerta desde fuera solicitando así al Apóstol el permiso para acceder a su templo. Esta se encuentra en la conocida plaza de la Quintana, en un lateral de la Catedral.
Los requisitos para conseguir la indulgencia de Dios en año Santo han ido variando a lo largo de los años, no siendo necesario actualmente recorrer un número determinado de kilómetros para conseguir este perdón. En cambio sí es requisito indispensable el visitar la catedral para honrar al Apóstol Santiago, así como recibir el Sacramento y la Comunión.
Además de estos años Santos Ordinarios, se estableció desde el siglo XVI los denominados años Santos Extraordinarios, convocando uno para el año 2016 por mandato del Papa Francisco. Estos se celebran como conmemoración de un acontecimiento especial, o en este caso como método para reivindicar el poder y la importancia de la Iglesia en estos tiempos tan convulsos.
Pero no solo Santiago goza del privilegio de conceder este tipo de indulgencias, existen en total otros cinco templos repartidos por todo el mundo con la capacidad de otorgar el Jubileo, siendo además del de Compostela en España, los de Santo Toribio de Liébana y Villafranca del Bierzo; en el extranjero, los centros de peregrinaje principales son los de de Jerusalén, Roma y Caravaca de la Cruz.
Pero no se trata tan sólo de un acontecimiento religioso reservado para el catolicismo, sino que pretende aunar y confraternizar tanto con judíos como con hebreos y demás religiones católicas.
A continuación, mostramos una tabla con todos los períodos del año santo desde 1909 hasta 2094. Para que puedas ir haciendo planes:
| 6 AÑOS MÁS | 5 AÑOS MÁS | 6 AÑOS MÁS | 11 AÑOS MÁS | |
|---|---|---|---|---|
| 28+ | 1909 | 1915 | 1920 | 1926 |
| 28+ | 1937 | 1943 | 1948 | 1954 |
| 28+ | 1965 | 1971 | 1976 | 1982 |
| 28+ | 1993 | 1999 | 2004 | 2010 |
| 28+ | 2021 | 2027 | 2032 | 2038 |
| 28+ | 2049 | 2055 | 2060 | 2066 |
| 28+ | 2077 | 2083 | 2088 | 2094 |
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